Se convocó a la población de Lanzarote, y a su vez en el resto de las islas del archipiélago y en todos aquellos lugares sensibilizados con esta problemática, para uno de los actos de repulsa contra las prospecciones petrolíferas en aguas próximas a Fuerteventura y Lanzarote, y que de manera clara ha sido el “último pulso” contra Soria y Repsol, a pocos días de que se de el visto bueno para su inicio definitivo.
Como era de esperar resultó ser una manifestación muy multitudinaria, más allá de cifras contradictorias y discutidas, donde predominaron las camisas y las banderas negras, en muestra de repulsa a las prospecciones y al modelo energético implantado.
La manipulación de los aparatos del Estado es tal, que las cifras que dieron los organizadores a los medios fueron cifras dichas por parte de los Policías Municipales, 35.000 manifestantes; las cuales fueron contradichas luego por la Delegación del Gobierno y su Delegada, María del Carmen Hernández Bentos, según cifró la Policía Nacional, en 13.000 manifestantes. Sin embargo, más allá de todo eso y sin duda alguna, en Lanzarote ha sido la mayor manifestación que se ha celebrado, y con mucha diferencia de otras anteriores.
Pero no sólo es esa la contradicción entre los entes del Estado, ya que el propio Cabildo de Lanzarote, que se ha puesto a la vanguardia del NO AL PETRÓLEO, cuenta con un intercambiador junto al edificio del Cabildo (empresa de transportes que ha sido privatizada recientemente), y en el cual han realizado una inversión para poner 14 paneles solares y un aerogenerador de eje vertical de 13 metros, que están sin funcionar y cuya obra estaba prevista finalizara en 2013, donde también se incluían 210 paneles solares en los aparcamientos del cabildo y que se están instalando en éstos días.
Por no contar la escandalosa lista de litigios que se han originado en la adjudicación de los concursos públicos en Parques Eólicos en Canarias, y que han paralizado los proyectos durante más de una década , así como toda inversión futura y presente.
Otro de los que ha salido a la vanguardia del NO AL PETRÓLEO es Paulino Rivero, presidente del Gobierno de Canarias, cuando fue su propio gobierno quien modificó el Listado de Especies Protegidas de Canarias para que se pudiese hacer el Puerto de Granadilla en Tenerife. Presidente, que ha lastrado su rumbo y nos ha arrastrado al resto de ciudadanos de Canarias con él al fondo, por sus rencillas particulares, batallitas políticas y personales con José Manuel Soria, con quien ha llegado incluso a formar Gobierno en la pasada legislatura, antes de que Soria fuese nombrado Ministro.
Por eso, hoy más que nunca, donde la casta política da muestras constantes de sus contradicciones, donde el modelo de Estado se derrumba a marchar forzadas y donde se ha puesto en tela de juicio el modelo energético, la frase de un compañero anónimo en su pancarta nos recuerda:
NI DIOS, NI REY, NI PICHE
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